Existen diversos tipos de camas, cuya elección vendrá dada por los materiales disponibles en cada lugar, siempre acorde al gusto y disponibilidad del dueño y al tipo de caballo.
La paja es muy popular, ya que su precio generalmente no es muy elevado, es térmica, cómoda y suele funcionar bien en el drenaje. Ésta tiene diversas presentaciones:
- paja de trigo: con las mismas características arriba descritas y sobretodo, no le resulta apetecible al caballo de modo que no la comerá.
- paja de cebada: Su textura es suave y el caballo la puede encontrar apetitosa. Es importante que no tenga espigas, pues puede irritar la piel del caballo
- paja de avena o la de heno: que no se recomienda ya que es muy porosa y tiende a absorber los líquidos. Además, se corre el riesgo de que el caballo se la coma y terminará enfermando de cólico.
El serrín: puede ser una excelente cama, pero produce mucho polvo fino y puede causar irritaciones en la piel del caballo, especialmente si proviene del pino. De igual manera, el polvo puede penetrar en la mucosa nasal de tu caballo y causar daños severos. Debe mantenerse un cuidado absoluto en este tipo de camas ya que en cuanto el serrín se moja, se vuelve muy pesado y dificulta la limpieza de la caballeriza.
La viruta de madera suele ser utilizada cuando el caballo acostumbra a comerse la paja. Siguiendo una correcta limpieza puede llegar a durar hasta 25 ó 30 días. Se trata de un material fácil de conseguir y muy absorbente por su textura ligera. No suelta polvo una vez extendida. Tanto el serrín como la viruta deben estar totalmente libres de clavos o cualquier otro material cortante.
Estiércol de caballo seco: hay quien todavía usa este material dejando secar las heces del caballo al sol para que se deshidraten y se desinfecten (el sol tiene poder bactericida, parasiticida y viricida). Sin embargo, esto no es recomendable por antihigiénico y por conllevar un gran riesgo para la salud del equino.
Papel de periódico: es una buena opción si el caballo es alérgico o hipersensible al polvo. No obstante, el mantenimiento debe ser realizado con sumo cuidado, ya que se apelmaza de inmediato.
Lo más importante es ofrecer confort y el menor cambio de temperatura dentro de la caballeriza a lo largo del día. En climas extremos con gran diferencia de temperatura entre el día y la noche, el manejo, selección y cuidado de la cama debe ser un asunto a ser vigilado estrechamente. Del mismo modo, si las camas se conservan húmedas pueden llegar a causar serias lesiones en los cascos.